Quienes siguen a Rock N´ Board desde sus inicios, saben que cada cierto tiempo nos damos el lujo con alguna entrevista que nos llena de satisfacción tanto realizarla como difundirla. Hoy estamos ante uno de esos casos. Esta vez, es sobre la artista Georginia Ciotti, quién tuvimos el placer de entrevistar personalmente en uno de nuestros viajes por Argentina. Mirá la nota.
Hace un tiempo, cuando comencé a colaborar y formar parte de Rock N' Board, la ansiedad y el entusiasmo iban más rápido que yo, mis ojos buscaban talento e historias interesantes por todos lados como un filtro fino en la rutinaria Buenos Aires, así me encontré no sólo con el exquisito trabajo de Georgina sino también con la oportunidad de compartir su experiencia como artista a través de una nota o una entrevista.
Foto: Pintura, Panel 4,50 x 1,85 m.
Nos encontramos con ella durante su participación en el
MOS 2012, (mirá la nota haciendo
click acá), con un poco de vergüenza me acerqué y le pregunté si le gustaría hacer una entrevista para nuestro medio, lo que acá resulta fácil y puedo resumir en una frase corta y bien formulada, fue en esa ocasión mi primer encuentro, tímido pero definitorio, con "lo que me gusta hacer".
La verdad que pasó mucho tiempo desde aquél "sí, no hay problema, anotá mi número" y de la entrevista que acordamos hacer pocos días después, pero de alguna manera tiene un poco que ver con todo aquello que llamamos procesos. Cuando sabemos que vamos hacia algún lado pero no sabemos bien adónde, y de a poco "el universo conspira" para que lleguemos a ese lugar, pues bien, me llevó tiempo.
Publicar esta entrevista hoy implica para mi un aprendizaje enorme y sobretodo la responsabilidad de llevar adelante lo que uno se proponga, en ese camino otras entrevistas me resultaron más fáciles y otros proyectos tomaron forma con mucha más seguridad que con la que le pregunté a Georgina si podía entrevistarla, por eso ahora comparto con ustedes esta experiencia como algo personal y espero que les sirva a alguien también tanto como lo que significó para mi.
Un domingo de diciembre llegamos a su casa-taller, y de una manera muy relajada nos invitó a pasar, un ambiente anaranjado y estimulante nos recibió para empezar a introducirnos un poco en el mundo de Georgina Ciotti, la mujer que doma bestias con la magia de sus pinceles.
Foto: Georgina Ciotti.
-¿Cómo empezaste a meterte en el arte?
- En el arte en realidad siempre estuve metida me parece, desde muy chica. Como que siempre estuve vinculada dibujando, pintando, siempre hacia talleres, siempre hice cosas, lo que pasa es que no había trabajado, una cosa es estar haciéndolo de hobby, o como algo muy íntimo, muy propio, y lo otro es hacerlo como una actividad diaria que es una manera de vivir. Hacés lo que te gusta y además vivís de eso, empezás a tener un estilo de vida acorde a esa actividad.
Imagen: Mural Subte "A" Estación Plaza Miserere. Buenos Aires.
En realidad yo hice una carrera de diseño de indumentaria y una carrera de efectos especiales al mismo tiempo, mas o menos una encimada con la otra, acá en Buenos Aires, y cuando terminé mi carrera empecé trabajando con efectos especiales en cine y publicidad, y ahí fue cuando en un momento, en el 2000, me fui a vivir a Barcelona, entonces ahí estuve trabajando un par de años, también en cine y publicidad, siempre con efectos especiales, pintaba también pero como algo más mío, no como una actividad laboral o algo así.
Imagen: Detalle Mural Hostal Paraíso, Barcelona.
-¿Qué tipo de efectos especiales hacías?
-Lo que yo hacía era criaturas, animatrónicos y criaturas varias, trabajé en dos empresas de efectos especiales allá, en Nasa y en DDT en Nasa eran como más brutos, más ambientales, explosiones, cosas raras como disfrazar un edificio entero de Papá Noel, cosas extrañísimas todo el tiempo, y después comencé a trabajar con DDT, empecé a hacer más criaturas, hacia criaturas en la otra pero no tan seguido, ahí estuve trabajando con la Fura del Baus con Pichicicles, eso fue teatro y después para cine hice trabajos con Almodóvar, con Guillermo del Toro, y en un momento determinado como que empecé a decir que no a trabajos de efectos especiales, y tomé la decisión de vivir de la pintura.
Ya estaba pintando en la calle, salía a pintar de vez en cuando allá, hacía cosas pequeñas, no muy grandes, pero no tenía espacio en mi casa para hacer formato grande y quería hacerlo, y por eso salí a la calle, y cuando salgo pasó algo nuevo, yo salí a la calle por un motivo y me encontré con otras cosas, la experiencia de pintar en la calle era algo que te habría el panorama en mil direcciones, ahí es cuando dije que no a trabajos de efectos y decidí quedarme con dibujo y diseño, lo que más se asemejara a la pintura, empecé a hacer el trabajo conceptual para diseño de personajes, hicimos El Laberinto del Fauno y Hellboy y paralelamente a eso empecé a pintar mas seriamente, tomarlo más seriamente y proponerme "voy a intentar vivir de eso, a ver que pasa".
Imagen: Diseño conceptual para "El Laberinto del Fauno" de Guillermo del Toro.
Un día me pidieron un mural en un local, lo hice y fue la pieza mas grande que había hecho porque yo hacia cosas en la calle pero no tan grandes, y fue muy loco porque el local tenia una arquitectura muy copada, muy característica, te podías meter por muchos lugares, eso también me abrió posibilidades que no había considerado en la calle que era adaptarme a la arquitectura, meterme por diferentes lugares, eso es alucinante.
Foto: Mural peluquería Walter Acevedo. Primer mural en Buenos Aires.
Después de eso no paré porque ese local tiene mucha publicidad, va mucha gente y eso me trajo más trabajo y empecé a dedicarme profesionalmente, eso hizo que pintara más, cuando necesitás los ingresos monetarios te ponés más las pilas, entonces ahí fue cuando arrancó, lo que sucedió creo es que yo había estado coqueteando con eso durante casi toda mi adolescencia y no me decidía del todo y yo estaba bien haciendo lo que hacia pero no era del todo feliz y cuando empecé a hacerlo la sensación fue como que el universo empezó a conspirar a favor, como que vas en armonía con lo que tiene que ser, así fue la sensación, como que estaba donde tenia que estar y empezó a cerrarme todo y así hasta ahora, me quede 10 años allá haciendo esto y hace 3 llegué acá, volví.
Foto: Sangre y Oro. Pintura para el stand de la Mono en Feria Internacional de Arte contemporáneo de Barcelona.
Y cuando volví también fue decir: "bueno vamos a ver que pasa acá", y fue buenísimo, yo tenía por internet, viste la red, mucha difusión en el trabajo y me conocían ya acá, y cuando llegué estuvo bueno porque ya sabían lo que yo estaba haciendo, salió trabajo, el primer año fue alucinante y me quedé.
-Tu trabajo tiene algo muy característico ¿Cómo fue que definiste tu estilo?
Fue algo natural, yo siempre de muy chica tuve un estilo muy particular, no fue algo que me costó mucho, la gente veía mi trabajo y decía: "ahh esto es de Georgina", igual en España yo creo que pasaron dos cosas, una esta ligada con la otra, tiene que ver con la raíz y el síntoma siempre digo yo, yo allá fui como a encontrarme de alguna manera, fui como a definirme, fue alejarme de algunas cosas para encontrarme sola conmigo misma y ver quien era yo realmente.
Imagen: Pintura mural en Apart-hotel en Portaferrisa 21, Ciutat Vella. Barcelona.
Eso se vio al final en mi obra, a lo que me dediqué, es como que cuando llegas a un lugar donde nadie te conoce, nadie sabe quien sos, las posibilidades son infinitas, siento que puedo hacer lo que quiero, te da una libertad extrema alucinante, que abruma, pero que es una cosa que es como el vértigo, te gusta, te atrae, también te da miedo y es una gran responsabilidad también, es definir qué voy a hacer de ahora en más, cómo voy a definir mi vida, y creo que también sucedió en mi obra, empecé a definirme como persona, a tener mas claro las cosas, a plantarme mejor en el mundo, a saber lo que quería y a sincerarme, encontrarme conmigo, decir: "sí yo quiero esto, esto me hace feliz", y en mi obra se empezó a reflejar.
Imagen: Detalle de "Centinela" mural, Flores, Buenos Aires.
En mis primeros trabajos había mucha figura femenina, sigue habiéndola pero ahora un poco menos, tenia que ver con eso, con la femeneidad, con el lugar de la mujer, cuál es le lugar de la mujer, cuál era mi lugar como mujer, frente a una cultura, frente a un grupo de artistas, cuál era mi lugar como mujer artista, para mi se definió allá, aparte también cuando llegué era diferente la estética de allá, las ciudades, todo lo que vi influyó mucho, el diseño, los museos, y aparte en esa época se pintaba muchísimo en la calle, yo salía con una camarita y sacaba fotos y fotos y fotos a todo lo que encontraba en la calle.
-¿Que opinás de lo que fue el MOS?
-El MOS está buenísimo, me gustó mas el año pasado, me gustó mas el nivel, me gustó que trajeran gente de afuera para que pudiéramos cambiar opiniones y ver lo que se está haciendo afuera y los de afuera que puedan ver lo que se esta haciendo acá, eso es importante, y en formatos cada vez mas grandes, acá hay paredes, hay un montón de paredes, no hay problemas para pintar, incluso el gobierno apoya que pintemos, creo que está buenísimo, que se dignifique, está bueno que pasen cosas como el MOS.
Foto: M.O.S. 2012
-¿Cómo fue volver? ¿Cómo fue la continuación de tu carrera acá, y la combinación de tu vocación de artista con trasmitir lo que aprendiste y dar clases?
-Volví porque todos los caminos me trajeron para acá, fue un ciclo que creo que se cumplió y todo me traía para acá, como cuando empecé a pintar que todo fluía para ese lado, de conectarme con las señales del entorno, con todo lo que estaba pasando, "yo me tengo que volver me parece", soy así, no doy un paso sin fijarme, vine tres meses y probé, me quedó la sensación de que acá había mucho por hacer, de que es un lugar por explotar, y que tenía ganas de dar clases, era algo que venía masticando en Barcelona y nunca terminaba de definirlo y acá me decidí a hacerlo.
Imagen: La siesta del fauno. Mural/Panel 5 x 3,80 m. Buenos Aires.
-¿Cómo es la dinámica de tus clases? ¿Cómo influye la dificultad y la precisión de tu obra y todo el bagaje cultural que traes con vos en los alumnos?
- La complejidad, la estructura y el tecnicismo, todo eso que tengo yo, es como decís vos es un bagaje de años de cosas como mamando como metiendo en mi vida y mi historia, estudié, hice cursos, cositas, experimenté, todo sumó, efectos especiales, materiales raros, todo sumó y el resultado es este, cada uno tiene su camino, siempre le digo a los que vienen a aprender que cada uno tiene que construir su camino y que su camino los va a definir y que todo lo que hayan hecho lo aprovechen para sacar adelante su trabajo y desarrollar una identidad propia que no es nunca la mía o la tuya, es la del otro.
Cuando un alumno viene a querer aprender, la idea no es que logren ni mi tecnicismo, ni mi exactitud, ni mi prolijidad, la idea es que cada uno encuentre su camino, para eso estoy yo ahí dándole clases, para que cada uno encuentre su camino se defina y se diferencie también de los demás, no? que no sea igual a nadie, es como un proceso.
Imagen: Boceto.
-¿De todo lo que hiciste hay algo que digas "es lo que más me gusta"?
-Lo que más me gusta es pintar en paredes.
Foto: Georgina pintando "La siesta del Fauno".
¿Y hay alguna obra de tu trabajo que te guste más?
-No, siempre pienso que lo mejor va a ser lo que va a venir, no estoy muy enamorada de mis trabajos, tengo una cosa muy desapegada con mis trabajos, es como que hago y me deshago, y eso me libera mucho, tengo obra pero poca, toda enrollada y guardadita, ahora tengo más, pero como que la acción de hacer y deshacerse me parece interesante y es una de las partes que más me interesa y después el pintar en la calle es una experiencia realmente diferente al resto, estás rodeado de gente que se relaciona con vos y opina y te influencia.
Foto: Mural de libros, evento en el Teatro San Martín. Buenos Aires.
Este mural es una obra especial, con un soporte atípico, un muro construido con 5000 libros, donados por la gente, librerías y editoriales, sobre el cual Georgina pintó, el lomo de cada libro conformaba la totalidad de la obra, que sería desarmada para volver a donar los libros a gente que no tuviera fácil acceso a ellos. La idea fue de Georgina Ciotti y Eliana Arevalo.
-¿Cómo ves la escena del street art en Argentina?
-Lo que veo es que acá la gente se está apropiando del espacio público, que eso es fundamental, mucha gente lo está haciendo inconcientemente y no sabe qué es lo que realmente significa apropiarse del espacio público, lo que está sucediendo en realidad es eso, eso habla justamente desde el síntoma de lo que sucede, el arte es siempre el síntoma de una sociedad, vos siempre mediante el arte, desde la pintura, mediante, las actividades artísticas determinadas, definidas culturalmente, es un reflejo de lo que le esta pasando a la sociedad en ese momento desde lo político, desde lo social.
Yo creo que acá el hecho de que la gente pueda apropiarse del espacio público habla de un país en el que el pueblo está muy presente y es parte de lo que está pasando y me parece lo más fuerte, que la gente elija, ...la verdad no me cabe que me pongan este cartel acá, voy a pintar algo..., muchos lo hacen inconcientemente sin saber pero haciendo eso están plantándose y haciendo historia, cuando vos llegás a un país, un pueblo, una cultura donde todas las paredes están pintadas por el pueblo es fuerte!
Foto: Georgina pintando mural en calle Honduras, Palermo Soho. Buenos Aires.
-¿Ves algún antagonismo entre el arte en galerías y el arte en el espacio público?
-Otra de las características que tiene el apropiarse del espacio publico y pintar en la calle es que el arte está para todos, no está para una cierta elite de personas que se les ocurre ir a una galería, pagar, o ir a un museo, o tiene el interés de ir a una galería, y cambia completamente el hecho de ponerlo en la calle, es accesible a todo el mundo y eso es obviamente diferente.
En cuanto al artista en sí veo que no son incompatibles, el artista callejero después muchas veces expone en galerías, para el artista son dos cosas completamente compatibles, pero como concepto a nivel social son antagónicos porque es además como no depender de los galeristas, de los curadores, de los críticos de arte, es más independiente y hacés lo que se te da la gana y no dependemos de ellos para que alguien nos diga si lo tuyo es o no es, eso está buenísimo.
Foto: "Centinela" Mural. Flores, Buenos Aires.
-¿Tenés algún próximo proyecto?
-Si, pintar, tengo algunos murales que tengo que hacer, un trabajo a pedido que tengo ganas de hacer y luego un mural bastante grande en Libertador y Salguero, yo personalmente lo que tengo más ganas de hacer es empezar a pintar más grande en la calle, hacer algo con grúa, cosas grandes, dar clases y seguir pintando.
-¿Tenés referentes?
-No soy de agarrar muchos referentes, pero estamos constantemente influenciados, todo el tiempo estas mirando cosas que se te meten en el cerebro y después salen por otro lado, cuando estuve en España y veía a la gente pintar en la calle y vi el trabajo de El Sam, un chico español que me partió la cabeza en un inicio, dije "uy! yo quiero hacer cosas así", es una bestia.
Después tuve mucha relación con tatuadores en una época y eso me influenció mucho en la estética al principio, y creo que también me influenció mucho el pop surrelista, Mark Ryden y todo esa gente, ya no, pero todo eso en un inicio estando allá hace 10 años me rompió la cabeza un poco, me influenciaron mucho, no hay un artista en particular pero si movimientos, no? el movimiento surrealista, toda la tradición japonesa del tatuaje, algunas cosas de artistas que ya ni me acuerdo el nombre, había uno que hacia unos retratos en carbonilla y dejaba que el tiempo los vaya desgastado, la carbonilla dura mucho en la pared, se la banca, imágenes de campesinos en carbonilla y la lluvia, el agua el tiempo los iba como desgastando y quedaban unas cosas maravillosas, hay otro que con una agujereadora va rompiendo la pared.
Imagen: El sueño de los Tigres.
-¿Y la música?
-La música, la electrónica me gusta mucho y cuando llegué allá me partió la cabeza la música, conocí cosas experimentales alucinantes, lo experimental. Siempre pinto con música.
-¿Cómo es tu proceso creativo?
-Yo suelo hacer proceso porque me gusta dibujar y aprovecho el momento del bocetado para dibujar mucho, son bocetos muy elaborados, se los muestro para que vean, aprovecho a dibujar que es lo que me gusta, además cuando tengo un cliente ayuda, y como me gusta lo termino bien, es como un ritual, me encanta el proceso de idear, de pensarlo, de dibujarlo antes, después lo paso a la pared, lo boceto en la pared y lo pinto, no hay mucho más, los colores los elijo en la pared, improviso mucho en el color, lo que no improviso en el dibujo lo improviso en el color, porque sino ya es mucho control, toda esa libertad se la dejo al color.
- ¿Algo que quieras agregar?
-Quieren tomar un té de malta?
Imagen: Detalle Mural Hostal Paraíso, Barcelona.
Fotos por cortesía de la artista entrevistada y con el único fin de ilustrar la nota.
-
Quiero agradecer especialmente a Georgina Ciotti y a Rod Ramone, por el arte y por la paciencia. Respectivamente.
